Se trata de una tradicional bodega mendocina equipada con piletas de epoxi que data del año 1959. En los inicios perteneció a la Bodega Maza y contaba con una capacidad de elaboración de 700 mil litros, que fuimos ampliando desde nuestra adquisición en el 2008.
Hoy en día se conserva su fachada original con un interior renovado equipado con tecnología de avanzada puesta al servicio de los mejores procesos de calidad. Huevos de cemento, tanques de acero inoxidable, fudres y barricas de roble permiten una capacidad de elaboración de más de 2 millones de litros. Nos encontramos asimismo en plena expansión de la bodega para continuar creciendo, sumando tecnología y brindando mejores experiencias para quienes nos visitan.
Doble cinta de selección, moledora con rodillo, cinta vibrante, enfriadora de vendimia, equipo de frio, caldera para calor, prensa neumática, bombas de bajas revoluciones son algunos de las maquinarias con las que opera nuestro equipo enológico integrado por profesionales dedicados a los diversos procesos, Angelina, Natalia y Gabriel, bajo la conducción de Héctor y Pablo Durigutti.
Nuestros vinos reflejan el justo equilibrio entre tradición e innovación – selección artesanal de las uvas, remontajes manuales, pisonage, levaduras autóctonas, control de temperaturas, maceraciones peculiares frías y calientes, prensas hidráulicas y tanques de acero – donde coexisten las técnicas ancestrales con las modernas tecnologías.